Carlos Viviani es el primer chileno en obtener el galardón, que destaca propuestas que inciden en el bienestar laboral.
La Asociación Internacional de Ergonomía concedió el prestigioso IEA/Kingfar Award al académico e investigador de la Escuela de Kinesiología de la Universidad de Valparaíso Carlos Viviani.
El docente es el primer chileno en obtener este galardón, que cada año busca honrar y destacar a profesionales de todo el mundo que hayan realizado alguna investigación de alta calidad para resolver problemas en esta disciplina, considerando en ello los factores humanos que inciden en el bienestar de las personas que viven en países en desarrollo industrial.
En el caso del profesor Viviani, el premio le fue otorgado por su tesis doctoral titulada "Antropometría de la población adulta trabajadora y su aplicación en un contexto ergonómico", trabajo que derivó en un paper ISI, constituido a su vez por siete publicaciones indexadas en revistas científicas revisadas por pares.
“Estoy muy feliz. El premio apunta a resaltar trabajos de doctorado en ergonomía y factores humanos. En mi caso se trata de una investigación realizada entre 2016 y 2020 con entrega de datos actualizados para poder diseñar espacios y objetos más seguros, tales como equipos de protección personal, mobiliario, maquinaria y cualquier otro objeto que sea usado por trabajadores chilenos”, explicó el profesor Viviani tras enterarse de la noticia.
El académico agradeció de manera especial a los profesores Pedro Arezes, catedrático de la Universidade do Minho (Portugal), e Ignacio Castellucci, profesor y director del Centro de Estudios del Trabajo y Factores Humanos de la Escuela de Kinesiología UV, por su permanente ayuda y orientaciones.
“Este reconocimiento sin duda es también para ellos, ya que su labor fue fundamental e imprescindible. Además, agradezco a la Mutual de Seguridad por su apoyo, el cual permitió la recolección de los datos antropométricos de casi tres mil trabajadores”.
Desafíos
Para el profesor Carlos Viviani, los desafíos que tanto Chile como otros países enfrentan en la actualidad en materia de ergonomía y factores humanos son múltiples y de gran importancia. En particular, señala los relacionados con el teletrabajo y la forma "atípica" en que la mayoría de las personas ha debido asumirlo y ejecutarlo.
“Esta modalidad fue forzada por la pandemia y muchos han debido teletrabajar y simultáneamente realizar labores domésticas, la mayoría de las veces sin las condiciones de habitabilidad, equipamiento y políticas organizacionales acordes. El teletrabajo debe ser planificado, estructurado y sociabilizado, cosas que debido a la emergencia sanitaria no fueron posibles de implementar”, explica.
Países como el nuestro debieron entonces subirse de golpe a este tren, lo cual nos obligó a repensar el trabajo en todo su contexto, pero, sobre todo, a repensar e implementar un reemplazo del histórico ´presencialismo´ por uno basado en objetivos”, argumentó el académico e investigador de la Escuela de Kinesiología de la UV.
En esa misma línea, Viviani se refirió especialmente al rol de las mujeres, que debido a la inequidad de género han sido las personas más expuestas a estas nuevas exigencias.
Y más allá del contexto de la pandemia, el especialista asegura que, si bien Chile se encuentra en una etapa de mayor madurez en lo concerniente a salud y seguridad ocupacional, todavía enfrenta desafíos y complejidades relevantes, como son los accidentes del trabajo fatales, si bien estos han disminuido significativamente en la última década.
“Manteniendo una gestión activa de los accidentes, según mi opinión, el protagonismo se está centrando en el diagnóstico, la prevención y el tratamiento de las enfermedades laborales, tanto físicas como mentales, lo cual requiere de profesionales que cuenten con las herramientas para identificar, evaluar e intervenir de forma holística. En el Centro de Estudio del Trabajo y Factores Humanos de la UV tratamos de entregar esas herramientas a la comunidad, por medio de investigaciones aplicadas, cursos y, recientemente, a través de un programa de magíster”, precisó Viviani.
Un tercer gran desafío que mencionó el docente de la Escuela de Kinesiología es el envejecimiento de la población laboral, junto con el crecimiento exponencial de las nuevas tecnologías en todo ámbito. Ante este escenario, Viviani dijo que es necesario avanzar en el diseño y rediseños de contextos laborales que sean sustentables en todo sentido.